Un lugar para todos aquellos que nos iniciamos en un nuevo mundo cargado de salud, bienestar, equilibrio y un largo etcétera de beneficios personales.

Un lugar donde compartir nuestras pequeñas aportaciones culinarias a un mundo de sabores y texturas que nos conquistan.

6 sept 2015

Por qué la decisión de cambiar de dieta

Desde que recuerdo, la carne y sus platos derivados, estuvieron presentes en mi vida. Como una especie de herencia cultural, este tipo de alimento se superponía a cualquier comida, horario o tendencia. La vida se desenvolvía en un completo y complejo circo alrededor de recetas confeccionadas con diferentes carnes o derivados de las mismas, muchas de ellas, exquisitas sin duda alguna.

Los resultados tardaron años en hacerse patentes, pero de forma contundente, se fueron haciendo un hueco en una realidad cotidiana, dejando tras de si una serie de consecuencias de mayor o menor, en función de como se tomasen, trascendencia. Pero eso es una historia del pasado y esto va de presente de futuro.

Un día, por esas cosas de la vida, esas cosas en las que siempre he creído, una persona apareció y con ella, los argumentos adecuados (esos que siempre aparecen cuando deben y nunca cuando más se buscan), que terminaron en un cambio de dieta como plataforma para entender y sentir una nueva forma de vida.

Mentiría si dijese que fue fácil, hubo momentos un tanto tensos, sobre todo al principio, cuando en las primeras tardes, incluso el dolor de cabeza atenazaba una forma de vida que se resistía a dejarse vencer sin pelear. Pero todo siguió su curso, los kilos fueron desfilando lenta y adecuadamente. La vitalidad perdida fue sustituida por una nueva forma de sentirla. El carácter, ese que demasiadas veces se volvía tenso e irascible, se fue dulcificando y dejando paso a una manera de pensar más reposada. En definitiva, todo parecía encauzarse hacia lugares más tranquilos y llevaderos, salvo un aspecto. Cada vez que en mi círculo de conocidos (que no de amistades pues afortunadamente estas están más allá de este tipo de polémicas) alguien se enteraba de mi cambio de dieta, una escena, que de tanto repetirse, se tornaba una vieja conocida, venían los comentarios, las críticas, los "ya te vale", "es que siempre estás con alguna de tus tonterías", y un pequeño etcétera de desatinos, de intentos de recomponer una mente dañada, jajaja, esa que asumían dentro de mi cabeza y así, todo parecía cobrar más sentido, pues nunca he sido demasiado dócil ante las críticas. No sé, seguro que no estoy en posesión de la verdad, pero sobre algo, si que tengo certeza, y es que me encuentro significativamente mejor de salud, de ánimo, intelectualmente y aunque la mayor asignatura aún no está del todo aprobada, mi ser emocional está un poco mejor y eso, amigos míos, es algo a lo que yo doy hoy y siempre, un gran valor.

Sólo me resta por decir que aún echo de menos algunos sabores que me acompañaron desde siempre, sabores a los que de alguna manera no siento la necesidad abrumadora de olvidar y que sigo pensando que en el equilibrio está la virtud y por eso me declaro hoy flexi vegetariano, que si un día quedo a comer con alguien y me como un entrecot..., pues tampoco se hunde el mundo, vamos digo yo. Una forma personal de entender la vida y por ello comienzo este blog. Un lugar donde poder compartir nuestras vivencias, nuestras ideas y sobre todo, una pizca de eso bueno que todos llevamos dentro. Para conseguirlo, nada mejor que lo que podamos aportar a los demás, nuestras recetas, nuestros conocimientos, los artículos que nos ayuden a mejorar y entender el por qué de las cosas y por encima de todo..., nuestra maravillosa sensación de que la vida es mejor compartida. Así que ya sabes, si quieres colaborar, serás bienvenid@

Y para terminar, sólo me resta dar las gracias a alguien que me puso en el camino..., 

Gracias Marta
hoy y siempre una luz a la que seguir





No hay comentarios:

Publicar un comentario